martes, 23 de marzo de 2010

El Gabinetazo, Harto Confundido

Reuniones importantes se dieron hoy en la sede de la SER, donde nuestros infuncionales funcionarios le dedicaron el día a la diarrea verbal, pero con la novedad que ahora es en ingles, para explicar y justificar la desmedida violencia acontecida por la mal llamada guerra vs el narcotráfico y los carteles de la droga en México. Guerra iniciada por nuestro al parecer emocionada presidente, al que al parecer es un placer para él que el país vaya viento en popa en el mar de la adversidad (económica y de seguridad).

Hilary Clinton y la plana mayor de seguridad del gobierno de la PAZ demócrata arriban para poner las líneas y medidas, trazar los planes y tomar control de la guerra contra el organizado crimen que es librada gracias a que sus mocosos consumen una cantidad de enervantes, los cuales son sumistrados vía México. Y ya encarrerados en el tema de estupidizantes debemos de aclarar que la guerra que se lleva a cabo en territorio mexicano es tan violente como las acontecidas en el Medio Oriente.

EUA es el abastecido, la demanda del gigante del norte de estupidizantes para sus mocosos que a los 18 años son demasiado jóvenes para ingerir alcohol, pero muy grandes para ir a la guerra es enorme y muy rentable. Pero también es abastecedor, ya que provee de armas a los organizados delincuentes para poder realizar sus traviesas operaciones en suelo mexicano. Armas que matan a militares y ciudadanos mexicanos que se juegan el pellejo para proteger a una bola de escuincles que les gusta drogarse.

La guerra librada en México es equiparable a una guerra contra el terrorismo, pues a pesar de que los fines de los carteles de la droga y los de los terroristas no son los mismos el impacto que tienen en la sociedad si es parecido. A los señores de la droga, a los capo de tuti los capos, no les interesa matar civiles, ni crear temor, les interesa completar su entrega, que le paguen y empezar otra vez, y para poder realizar sus tareas corromperán y destruirán todo obstáculo que evite su enriquecimiento. Los carteles no ponen autos-bomba, o realizan atetados, se enfrentan al ejército, porque para ellos son el enemigo. Corrompen a los policías municipales, estatales y federales, porque estos están muertos de hambre, y triplicar su sueldo en una semana por hacerse güeyes les viene muy bien. No tienen mucho que perder y todo que ganar.

La DEA y las demás agencias de seguridad estadounidenses también son corrompidas, de no serlo, serian muchos más los arrestados del otro lado del río.

Pero bueno, Hilary y su rudo equipo vienen a tomar el control o por lo menos a poner deadlines y trazar los nuevos planes, mismos que sin unas estrictas medidas del otro lado del muro no servirán de nada.

Una disculpa amable lector, pues debido a la cantidad de información, el desate de la ola de violencia y todo lo acontecidos desde la primera semana de este mes saco de su órbita a este irreverente espacio, pues no podía asimilar tanta cruel información a la velocidad que se generaba. Pero ya estamos en órbita de nuevo.

Críticas.

Recibí varias observaciones sobre la agresividad de este IRREVERENTE ESPACIO, se me pido que buscara convencer.

No busco convencer a nadie, busco inquietar a las personas, despertar la chispa de curiosidad, quitar vendas estupidizantes con mi única arma, la verdad, que por desgracia suele ser cruel. Buscare convencer cuando sepa que hay una opinión antagonista, hay alguien que piensa diferente.

El fin de este espacio no es convencer, es despertar, despertar algo, puede ser adversidad, reflexiones o críticas, pero hacer que la gente opine.

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