El Cierre del Caso Paulette y la (in) Justicia Mexicana

Todo lo referente al sistema gubernamental de cualquier país es difícil. Después del amor, la política de Estado es la labor más difícil que existe. Y dentro de esa complejidad de los sistemas gubernamentales, en grado de complejidad, la impartición de justicia se lleva la presea de oro.

La impartición de justicia se lleva la presea de oro, pues siempre quedara alguien inconforme con el fallo que dictamine el juez correspondiente. La impartición de justicia no se basa en criterios de ver que persona es buena y quién no; la impartición de justicia se basa en la capacidad de la parte acusadora de demostrarle la culpabilidad a quien acusa. Esto puede ser entre dos particulares (empresa, personas, gobiernos, etc.) o bien entre el estado y una empresa o personas.

El caso Paulette es como todo caso complicado, pero aquí en mayor grado por el nivel de publicidad que creo y se le creo. Cuando los medios masivos de comunicación meten su cuchara en algún caso de esta índole las cosas tienden a salir complicadas.

En casos de investigación sobre cualquiera que sean las índoles del delito, la información siempre debe de ser reservada y manejada con mucha precaución, pues no conviene nunca hablar de más, menos cuando se trata de la investigación enfocada a atrapar o condenar a un delincuente.

La información debe de ser de acceso público, pero no en los momentos más álgidos de la misa, cuando las pistas y las investigaciones apuntan a la resolución del caso.

Como la impartición de justicia se trata de pruebas, pero se inicia con ciertas hipótesis habrá ciertas líneas de investigación o hipótesis que vayan siendo descartadas durante el transcurso de la investigación. Tenga por seguro, que habrá errores, habrá detenciones y arrestos que no sean a los verdaderos culpables, las pruebas dirán si el arresto procede o no en un auto de formal prisión.

El ex procurador del Edo. Mex. no supo manejar la información sobre el caso Paulette, como los medios influyeron en la confusión.

Bazbaz fue despedido por hacer bien su trabajo, lo corrieron por que a la opinión pública no le gusto los resultados de las investigaciones y lo que las pruebas revelan. Así, jamás lograremos progresar.